En esta oportunidad, desde Cuidando la Salud queremos contarles algunos trucos y consejos muy fáciles de realizar, que pueden llegar a tener una gran efectividad a la hora de evitar la hinchazón del abdomen, o de ayudar a deshincharlo.
Generalmente, las personas sufren de hinchazón en la zona abdominal cuando se ha comido demasiado. Aunque también se puede deber a otras causas como la acumulación de líquidos o de gases. La inflamación también puede estar relacionada a problemas digestivos tales como la gastritis o el estreñimiento.
Cómo evitar la hinchazón de la zona abdominal
Evitar la sal
Cuando ingieres más sal que la necesaria, el cuerpo retiene más fluidos, y como consecuencia de ello tendremos una silueta redondeada. Por eso es recomendable reemplazar la sal con especias, vinagre y limón, ya que ayudarán a que tus comidas no sean insípidas.
A pesar de ello, deberás tener cuidado con el picante, ya que por ejemplo la nuez moscada, la pimienta negra, el chile, la cebolla, el ajo, la salsa de tomate y el vinagre pueden generar inflamación en la zona superior del estómago, por lo que se recomienda no abusar de ellos.
Consumir agua y jugos sin azucar
El agua te ayuda a prevenir la retención de líquidos y combate el estreñimiento, y es por eso que se recomienda beber al menos dos litros por día.
Los jugos sin azúcar son otras de las mejores opciones para reducir la inflamación del abdomen. Las frutas que tienen color naranja son las que los especialistas más recomiendan, ya que poseen un alto contenido de fibra, antioxidantes, vitamina C y beta caroteno. Las naranjas, la zanahoria, el melón y los duraznos son algunas opciones.
Reducir el consumo de carbohidratos
Los carbohidratos refinados son los peores para la hinchazón abdominal, ya que al haber sido despojados de su fibra, se transforman encalorías vacías de nutrientes. Un claro ejemplo son las harinas blancas que se consumen en panes, pastas o pizza.
Además, el cuerpo almacena los carbohidratos en forma de glucógeno. Con cada gramo de esta sustancia, se almacenan tres gramos de agua. Por lo tanto, las proteínas vegetales deberían cubrir el 25% de tu ingesta calórica diaria. Además, te darán sensación de saciedad y le aportarán mucha energía a tu organismo.
Consumir mayor cantidad de vegetales cocidos
Si bien su valor nutritivo no es igual al de los vegetales crudos, ocupan menos lugar en el intestino. Cocinarlos al vapor es una gran alternativa que nos permitirá reducir la pérdida de nutrientes.
Evitar determinadas comidas que producen gases
Algunas comidas producen gases o flatulencias, como por ejemplo los frijoles, las arvejas, las lentejas, el coliflor, el brócoli, los repollitos de Bruselas, el repollo, las cebollas, los cítricos y los pimientos. Es recomendable evitarlos.
Las bebidas carbonatadas también contribuyen a la hinchazón en la zona abdominal, ya que producen la permanencia de gas en el cuerpo.
Comer despacio y reducir las porciones
Ser rápido al comer produce gases y hace que lo hagamos en mayores cantidades. Es por ese motivo que se recomienda comer despacio, ya que ayudará a una buena digestión. Una comida saludable debería tomarte unos 20 minutos.
Otro consejos que suelen recomendar los especialistas es comer en pequeñas porciones divididas en varias comidas al día, ya que serán más fáciles de digerir.
Evitar bebidas acidas
Bebidas como el alcohol y el café contribuyen a irritar tu conducto intestinal y causan inflamación. Es por eso que se recomienda beber este tipo de bebidas con moderación.
Evitar las frituras
Las comidas fritas tardan más tiempo en digerirse y generan una sensación de pesadez, y aunque las grasas son necesarias para la salud de tu organismo, será mejor elegir las grasas ácidas monosaturadas, como las que se encuentran en el aceite de oliva, el aguacate y las nueces.
Consumir fibras con moderación
La fibra ayuda a hacer una buena digestión y evitar el estreñimiento. Sin embargo, no se la debe consumir en exceso ya que puede generar flatulencias, distención abdominal y diarrea. Incorpórala en tu dieta de a poco.